Un mundo feliz ~ Aldous Huxley

14.9.13

Título original: Brave new world
Serie: Libro único
Edición: Debolsillo, 2011
Páginas: 211
ISBN: 9789871138517
Sinopsis:
Un mundo feliz es un clásico de la literatura de este siglo. Con ironía mordiente, el genial autor inglés plasma una sombría metáfora sobre el futuro, muchas de cuyas previsiones se han materializado, acelerada e inquietantemente, en los últimos años. La novela describe un mundo en el que finalmente se han cumplido los peores vaticinios: triunfan los dioses del consumo y la comodidad, y el orbe se organiza en diez zonas en apariencia seguras y estables. Sin embargo, este mundo ha sacrificado valores humanos esenciales, y sus habitantes son procreados in vitro a imagen y semejanza de una cadena de montaje...

Comentario personal

‘Un mundo feliz’ es una distopía a la vieja usanza, con momentos impactantes y frases de miedo. Huxley se luce mostrándonos un mundo sobrecogedor: los niños se ‘decantan’ (en vez de nacer) en laboratorios donde sus cualidades tanto físicas como psicológicas son ajustadas mediante la genética y el condicionamiento. Se han dejado atrás las familias, los padres y los hermanos; aquellos términos son una blasfemia que debe ser olvidada. La sociedad se divide en rígidas castas destinadas a trabajar según su inteligencia.

Para alcanzar la felicidad, el placer se da a paladas. El soma es un suplemento de las drogas y el alcohol sin sus efectos secundarios, con el que las personas pueden tener vacaciones siempre que quieran; el matrimonio y la fidelidad se han dejado atrás por implicar sentimientos negativos y autodestructivos tales como los celos y la posesividad, dando pie a relaciones sin ataduras, con sexo a raudales y sin consecuencias de ningún tipo. Sin embargo, este sistema que a simple vista es idílico, en el fondo no es tan feliz…

Con un mundo así, sólo podía sentir una cosa durante toda la lectura: indignación. Y es que Huxley se empeña en hacernos saber que su creación muy bien podría ser nuestro futuro: presos de la tecnología y la decadencia, una solución eficaz es la hipnosis ―o hipnopedia, como le llaman en el libro― para modificar conductas en pro de una sociedad armoniosa y, sí, feliz.

Conocemos una serie de personajes con distintas posturas, incluso en este mundo perfecto. Bernard Marx es un psicólogo Alfa que no reúne las condiciones para serlo: es más bajo y menos musculoso, y sufre de continuos cambios emocionales. Rehúsa tomar soma, y vive desgraciadamente. Es un personaje que en un principio creí llevaría la batuta, sin embargo, luego se convierte en un patético títere al que la fama consume. Personaje desperdiciado número 1. Lenina Crowne es la protagonista… si podemos llamarle así a una mujer que lo único que quiere es tirarse a otro personaje durante toda la novela. Personaje desperdiciado número 2.

Helmholtz Watson es un amigo de Bernard, pero no tiene las falencias de ese personaje. Creo que le faltó más protagonismo, aunque hacia el final su presencia se hace indispensable para el cara a cara con el sistema. Por último nombraré a John el salvaje, el único personaje que me provocó lástima y compasión. Es el personaje de los porqués, el que necesita comprender antes de decidir.

La novela cuenta con partes muy marcadas y tiempos claros, e incluso con escenas graciosas. Henry Ford se ha convertido en Dios; me entraba la risa cuando algún personaje decía ‘¡oh, Ford!’ en alusión a ‘¡oh, Dios!’. Por otro lado, el final es previsible, sin embargo, el cómo es impactante. Las últimas páginas son sublimes, y los párrafos finales son la bofetada que el mundo feliz requería.

Conclusión

Lectura obligatoria para los amantes de los clásicos y de las distopías en particular. ‘Un mundo feliz’ destaca las carencias de las distopías juveniles actuales, que han dejado atrás lo esencial: la crítica a la sociedad, pero una crítica que incluso produce repulsión por esos procesos e ideologías que llevan a la humanidad a destruirse a sí misma. En definitiva, una novela absorbente que deja huella en el lector.

Valoración: 9/10



Sobre el autor

Aldous Huxley (1894-1963) es autor de varias novelas y ensayos que han recibido el aplauso unánime de la crítica y el público, como Contrapunto, La isla y Las puertas de la percepción. Con Un mundo feliz dio a conocer una de las utopías más inquietantes del siglo, así como un talento literario difícilmente superable.




Si bien 'Un mundo feliz' no tiene continuación, Aldous Huxley escribió, casi treinta años después, una serie de ensayos reunidos en el libro 'Nueva visita a un mundo feliz', donde explica muchos contenidos de la novela que, tristemente, a esas alturas ya se habían convertido en una realidad.

12 comentarios:

  1. Yo ni sabia de que iba el libro!!!!! lo tenia en mi estantería y no más decía: A chido!
    Hasta que vi en otro blog que era un clásico y yo ni idea de que era.
    Gracias por la reseña, croe que ahora si le daré una oportunidad.
    Saludos!

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  2. No sabia nada sobre este libro jaja pero ahora que he visto esta reseña me he planteado leérmelo :3
    Por cierto, acabo de descubrir tu blog y me gusta mucho, así que me uno y me quedo por aquí ^^
    ¡Te espero por mi blog!
    Besos xx

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  3. Monze: ¡A por él! Lo bueno es que no es de esos clásicos tochos; por el contrario, es relativamente ligero y fácil de leer ;)

    Natalia: Nunca está demás devorar clásicos ;)
    Y muchas gracias por quedarte :)

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  4. Esta es una de mis grandes lecturas pendientes, después leer a Orwell y Bradbury esta es la distopía que tengo en el punto de mira. Voy a esperar un poco para leerla ya que tengo Fahrenheit 451 muy reciente y me pasa como a ti, que me pillo unos cabreos enormes con estos libros, así que mejor los dosifico.

    Un beso!

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  5. Has traído uno de mis libros favoritos, me parece incluso a ratos espeluznante la distopía que presenta
    Besos, un placer haber llegado a tu blog, me quedo por aqui

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  6. No me animo ahora mismo con los clásicos, pero comencé a leer hace un tiempo, por el instituto 1984, que es por el estilo, y la verdad es que es interesante, pero por lo menos ese se me hizo un poco pesado, quizás este me guste más.

    Besoote

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  7. AnGaMi: A mí me falta Bradbury, y sí, yo también quiero esperar un poco antes de hincarle el diente, quizá con qué ocurrencia del autor me vaya a encontrar.

    mientrasleo: Sí, bastante espeluznante según yo. Es que hay muchas cosas que reconozco que suceden actualmente. No quiero que acabemos como en el libro... Gracias por quedarte.

    Sandrus: Personalmente, me gusta más '1984' que 'Un mundo feliz', e incluso así, este último es más liviano que el primero. Creo que es por los personajes, pues el autor diversifica la narración, en cambio, en '1984' se centra casi por completo en Winston.

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  8. Me encantó la reseña, es un clásico que tengo pendiente, soy super fan de las distopías y muy adicta a los clásicos, pero por alguna razón me da miedo leer distopías clásicas. Es un sinsentido y ni yo lo entiendo ^^U

    Pero ya me animaré y este es uno de los que más me llaman ^^

    besote

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  9. Concuerdo con algunos de los comentarios..

    Tremenda reseña!

    Debe entrar un poco de repelús el leer distopías clásicas porque da la impresión de que cuentan la decadencia que hoy vivimos o que viviremos en un futuro no muy lejano. Es esa sensación de no querer ver nuestra propia desgracia y mejor esconderse, no sé, por poner un ejemplo (quizás malo, pero ilustrativo) como cual lectura frente a las profecías de Nostradamus. Esa sensación.

    Como bien dice Meli, es un sinsentido. Quizás la manía lectora a veces pasa la cuenta. :)

    Un abrazo amiga!

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  10. Meli ^^: ¡Que no te gane el miedo! xD Hablando en serio, sí intimidan un poco, pero debo decir que son muuuucho mejores que las juveniles, así que al menos cierras el libro con satisfacción.

    Paulina: Exacto. Son Nostradamus distópicos xD En todo caso, yo seguiré leyendo, mira que me encanta esa línea argumental ;) Así que tendremos distopías para rato en el blog...

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  11. Hace poco leí esta novela y me encantó =)

    ¡Saludos!

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  12. Sobre la reflexión de la democracia, que hace el auto; creo que hay un nuevo actor en la sociedad occidental, que, incluso, no contempló Louis A. en su libro: Ideología y aparatos ideológicos del Estado. el Narco, que esta perneando todas las esferas del poder y ya no sólo está buscando el poder económico, si no político y con ello, en breve, ideológico.
    De cuatro estamos ya en cinco A. I., que completaran el sueño de los justos: Familia, Iglesia, Escuela, M.M. de C. y Narco. ¿Qué más puede pedir la Superestructura? A. H., un genio.

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